Las Lechosas de mi papá.
Hasta hace un año había dos plantas de papaya en el jardín de la casa, la Reina y la Joya de la casa. Eran plantas muy prolíficas, daban mucho fruto, y mi abuela las usaba para hacer deliciosos dulces y buenas comidas.
En una ocasión el año pasado mi padre se acercó a una
de ellas, la hija, a recoger tres o cuatro papayas. Pero mientras agrarraba una
de las papayas con un gancho de madera, la papaya se desprendió y cayó sobre la
mano de mi padre, que cayó en el piso del garaje, golpeándose la cadera, el
hombro y la cabeza contra los mosaicos. . Mi papá se quedó aturdido con los
ojos cerrados, y yo solo dije: “mi pobre papá ”, y al rato se despertó.
My dad's papayas.
Until a year ago there were two papaya plants in the
garden of the house, the Queen and the Jewel of the house. They were very
prolific plants, they gave a lot of fruit, and my grandmother used them to make
delicious sweets and good food.
On one occasion last year my father approached one of them, the daughter, to pick three or four papayas. But as he was grabbing one of the papayas with a wooden hook, the papaya fell off and landed on my father's hand, which landed on the garage floor, hitting his hip, shoulder, and head on the tiles. My dad was stunned with his eyes closed, and I just said: “my poor dad”, and after a while he woke up.
